martes, 10 de abril de 2012

LA RESIDENCIA, INSPECCIÓN Y NOSOTROS (II)

El sábado día 30 de diciembre de 2012, recibimos una llamada telefónica de Bienestar y Familia en la que se nos pedía ir directamente a Inspección y hablar con la directora Yolanda Martín. Lo estuvimos discutiendo, y se elaboró el siguiente papel, que contenía lo que habíamos discutido. Con respecto al documento inicial, dos residentes se negaron a firmar, a causa de presiones del equipo directivo (en un sentido amplio).
El martes 3 de enero de 2012, ocho residentes presentamos un segundo papel, ampliando la demanda.










A YOLANDA MARTÍN


Jefe del Servicio de Inspección de
Bienestar y Familia
de la Generalitat de Catalunya










Rafael Almadana, Vincenç Andreu, Carles Armengol, Francisco J. Arranz, Mafoud Bela, José Luis Casado, Jesús Córdoba, Mulay Driss, Francisco Rodríguez y Josep Torrell, domiciliados todos ellos en la calle Manigua nº 66, de 08027 Barcelona, comparecen y para como mejor proceda en derecho, DICEN:


    Primero.—El viernes día 13 de enero de 2012, a través de Mª Engracia Querol, le llegó por vía telefónica a Josep Torrell la invitación para ir a hablar de la denuncia presentada contra la lar-residencia Afap y la residencia María Teresa Serra, sitas en el mismo edificio y dirigidas por la misma persona.


    Segundo.—El lunes días 16 de enero, mediante llamada telefónica, quedo concertada una reunión para el jueves día 19 de enero, además de confirmar que se va a proceder a una visita de Inspección.


    Tercero.—Aportamos, aquí adjuntos, a la Inspección de Bienestar y Familia los papeles que han circulado entre nosotros y representan nuestros planteamientos.


DOCUMENTOS


1. ¿Qué queremos?




Un cambio radical en la dirección de la residencia.


No tenemos nada contra Marta Carbonell en su labor de despacho.
Pero ha de dimitir como directora del centro.


El director ha de ser alguien versado en medicina, psicología, mínimamente informado de las leyes del sector y con amplio dominio de contacto con personas discapacitadas.


Ha de ser un director amigo de los residentes.


Ha de ser también un director que, al mismo tiempo, sea de confianza de la Generalitat y absolutamente independiente de los dictados de la Junta Directiva.


Serán los cargos exclusivos del director: a) el trato con los residentes; b) el trato con el personal asalariado y voluntario de la casa; y c) el diálogo con la junta.


Se harán un memorial de agravios con todo lo que ha hecho la directora saliente, que será discutido que el director entrante.


La cuestión de las dietas pasara a ser exclusivamente de la asistente sanitaria.
Las dietas de los residentes no pueden dejarse a uno simple dietista, sino que habrían de ser hechas por doctores en dietética.


Hay que ir con sumo cuidado con la oleada de robos (negada por la directora actual).


2. PROYECTO DE ACUERDO




Primero.—El precio pagado por cada residente cubre todos las horas de comer (desayuno, comida, merienda y cena), y no cabe cobrar ni un euro más en concepto de alimentación.


Segundo.—El régimen de sanciones no puede ser inventado para cada caso. Las sanciones serán las que se establecen en el régimen  interno. La junta directiva se compromete a velar porque se cumpla este estricto cumplimiento de las normas existentes.


Tercero.—El director técnico tiene la potestad de llevar las cuestiones administrativas con la empresa Europea de Restauración y Alimentación, ERIA, (u otras, si conviene), pero todo lo referente a los regimenes de los residente será competencia exclusiva de la Técnico Sanitaria, mejor dotada por sus estudios para el desempeño de esta misión. A su vez, la dietista de la empresa ERIA tendrá un día público al mes para discutir las incidencias de los menús.


Cuarto.—Los menús hipocalóricos y para hemodiálisis serán revisados con la participación de los residentes afectos por los mismos, y serán avalados por la firma de los interesados, para evitar malentendidos como los que ha habido hasta ahora.  Todos los menús serán públicos y estarán expuestos donde puedan verlos los residentes.


Quinto.—Los residentes son conscientes de lo que pueden comer y lo que no. Coartar esta consciencia equivale a tratar a los residentes como niños pequeños. Por ello, se podrá repetir mientras haya comida para ello, y un residente podrá dar a otro parte de su ración, siempre respetando las indicaciones médicas.


Sexto.—Las cuidadoras, los cuidadoras y las cocineras deberán cumplir con su deber pero también con el debido respeto a los residentes, a sus discapacidades respectivas y a su condición de seres humanos en pleno uso de sus derechos.


Séptimo.—La hora de comida no ha de ser jamás motivo para suspender o no ir a ninguna de las actividades sociales, que son un logro de los residentes y uno de los motivos principales de la actual ley de Bienestar y Familia. Las comidas se guardarán en el comedor o en la cocina, sólo con haber advertido de ello dos horas antes de la hora de la cena.


Octavo.—Al llegar quince minutos tarde a las horas de comida –sin causa justificada— se procederá a la retirada del primer plato.


Noveno.—La junta directiva se compromete a reponer las estanterías quitadas sin autorización, los colgadores que se han descolgado y las estanterías pequeñas para poner los instrumentos de lavar y afeitar, que fueron prometidos pero nunca fueron instalados. Asimismo se compromete a consultar a los nuevos residentes por los muebles que hacen falta en sus habitaciones para hacer su vida digna y agradable, y proceder rápidamente a su colocación. 


Décimo.—La junta directiva se compromete a advertir a la cocinera Montserrat  López y a la empresa ERIA que la actitud reiterada de esta cocinera es causa de malestar entre los residentes, porque los desprecia y humilla, y que de no cambiar de comportamiento, se habrán de exigir su inmediata  sustitución.




En Barcelona, a 17 de enero de 2012.



1 comentario:

  1. Me pregunto como sabiendo tanto no habeis conseguido un empleo y sobretodo como podeis aguantar tanto maltrato....supongo que esa es la faena de los martires.

    ResponderEliminar